lunes, 24 de diciembre de 2012

Incomparable regalo

Estamos en noche buena y en vísperas del más grande acontecimiento universal, el nacimiento del Salvador del mundo, la navidad, la verdadera navidad que su reconocimiento y aceptación constituyen la luz del corazón, que en su integridad traen los frutos del Espíritu Santo: paz, amor, gozo, paciencia,benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza. Es valioso que se mantenga la navidad permanentemente en el corazón del hombre, y que al recordar su nacimiento, se haga una verdadera fiesta espiritual y de reflexión, para que nuestra forma de actuar se enmarque dentro de los frutos mencionados. Tal parece que la influencia del marketing, nos conducen a ignorar la magnitud de este acontecimiento y le demos primacia a Santa Claus, a las comidas y bebidas, a los adornos y regalos. Cómo se siente Jesús, el cumpleañero, que nos trae el regalo más grande y lo rechazamos, lo ignoramos y nos dedicamos a los deleites de la carne? Deseo que pasen una feliz y verdadera navidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario